POEMAS DEL SALVAJE OESTE I


POEMAS DEL SALVAJE OESTE

NOTA INTRODUCTORIA

Aunque llegó un momento en mi vida en el que dejé de creerme poeta y me decidí a escribir relatos, algo que se me daba mejor y me divertía más, no por ello dejé nunca de escribir algún que otro poema en mis libretas, muchos de ellos siguen tan inéditos que ni siquiera los he pasado al ordenador. No así con este poemario en el que puse mucha ilusión pero que no he podido terminar. Espero que empezando a subir algunos poemas me anime a rematarlo como tenía pensado.

El Oeste, el salvaje Oeste, fue una de mis pasiones desde niño. Recuerdo el entusiasmo con el que vi las películas del Oeste de John Ford en aquel cine de pueblo, de madera, con bancos incómodos, mientras todos los niños comían pipas y caramelos y pateaban el suelo cuando llegaba el bueno a salvar a la chica. Yo salía del cine solo y meditabundo, deseaba estar en aquella naturaleza salvaje, con una pistola al cinto, enfrentándome a todo y a todos. De hecho llegué a pedirle a los Reyes Magos un revolver con cartuchera, que me trajeron, de plástico y bastante cutre, pero aún así yo salía por las afueras del pueblo, por caminos y bosques, donde nadie pudiera verme y allí desenfundaba como un verdadero diablo, nadie podía conmigo.

Con el tiempo llegué a ver una veta de oro en aquella temática, mitad historia, mitad leyenda, y me puse a cavar en la mina. Fruto de aquel trabajo a pico y pala fue este poemario y también algunos relatos humorísticos situados en el Oeste americano donde mis personajes se lo pasaban en grande burlándose de lo divino y de lo humano.

Recuerdo que este primer poema lo escribí justo cuando comenzaba a sufrir un terrible mobbing en el trabajo y de alguna manera lo escribí pensando en mi jefe acosador. Me hubiera gustado enfrentarme a él en aquel salvaje Oeste, aunque él fuera un pistolero más rápido nunca le tuve miedo.

POEMAS DEL SALVAJE OESTE
I
EL ENEMIGO MORTAL

Reza porque nunca te encuentres
Con tu enemigo moral, pistolero.

Reza porque tus caminos
Te vayan alejando de sus pasos.

Reza porque lo alcance
Antes que a ti su destino.

Porque no temblará su mano
Cuando sus ojos te avisten.

No te aguarda la muerte rápida.
No esperes dar el paso sin dolor.

No te conoce, no te ha visto nunca
Pero te odia desde el principio de los tiempos.

No esperes calmar su sed de venganza
Con una humilde súplica.
No creas que puede ser comprado con oro.

Reza porque nunca encuentres
Al enemigo moral, pistolero.

Reza porque la enfermedad
Haya consumido sus largos dedos.

Reza porque el sol del camino
Haya vaciado su fría mirada.

Porque sus pasos no se detendrán
Aunque note el temblor de tu cuerpo.

Porque su sonrisa no se borrará
Ni ante tus amargas lágrimas.

Porque su corazón es de piedra
Y su alma la sombra del odio.

No esperes una bala certera
Ni creas que un día es mucho tiempo.

No permitirá que el dolor te alcance.
Su destreza en el lazo
Retendrá el mordisco fatal.

No creas que algún dios intervendrá
Para acortar tus noches insomnes.

No conoce tu voz, nunca la oyó
Pero es inútil que rebanes tu garganta
Porque percibe las vibraciones
De tus pensamientos en el aire.

No supliques por tu vida
No pidas que acelere tu muerte
Porque nada atenúa su odio,
Ni el amor, ni la venganza.

No confíes en la luna llena
Ni en el hechizo demoniaco,
Porque el odio es más fuerte
Que todos los demonios del infierno.

Reza porque nunca encuentres
A tu enemigo mortal, pistolero
De nada te servirán tus balas
Ni la buena voluntad, ni la esperanza.

Reza porque no tropieces con su sombra
En medio del tórrido desierto,
Porque tu sangre calmará su sed
Y tus entrañas no serán bastante
Para poder calmar su hambre.

Reza porque el abismo se lo trague
Antes de que su caballo te olfatee
Y se ponga a desenfrenado galope.
Porque ni los fieros apaches
Ni los astutos sioux de la llanura
Podrán nunca con su corazón de hielo.

Reza porque nunca encuentres
A tu enemigo mortal, pistolero.
Reza tu última oración
Antes de que caiga la tarde.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.